Veneno
Mi hija fue envenenada, poco a poco a diario por al menos 5 años de su vida. Nadie sospechaba nada, incluso ella se veía muy saludable. Tenia tanta energía que incluso algunos creían que podría ser hiperactiva. Yo simplemente se lo atribuía a que era una niña saludable con mucha energía como todos los pequeños.
Nadie sospechaba nada porque ella solo estaba rodeada de personas que demostraban su amor y su cariño hacia ella.
Ella fue envenenada poco a poco por muchos años, incluso había veces que la veía cargando o comiendo de aquel veneno... pero pasaba desapercibido debido a la envoltura colorida y atractiva. Nadie sospechaba nada porque ella realmente se veía muy bien, alegre, contenta, sonriente y siempre animada...
Aquello que le daban como muestra de cariño y amor en realidad la estaban envenenando y aunque yo pedía que pararan, por que temía por su futuro, simplemente fui ignorada...
Hace unos meses me dieron la noticia, su corazón estaba propenso a desfallecer si continuaba así...
Resulta y acontece que mi pequeña tiene sobre peso, ¿Cómo es posible?, ¿pero si ella gorda, gorda no esta? Esa mancha en su cuello que por más que se talle y parezca suciedad, no lo es, era muestra de la resistencia a la insulina que su cuerpo gritaba y que quiere decir que esta o estaba cerca de convertirse en diabética...
Afortunadamente estoy a tiempo de contrarrestar todo el veneno que le dieron por años y mejorar la mal alimentación que por años también estuvimos manteniendo.
El veneno, el inofensivo veneno que le dieron por años son esas paletas heladas que le compraban cada vez que iba a la tienda, esas papitas, panques y demás comida chatarra que se fue acumulando con los años en su pequeño y lindo sistema y que hoy después de tantos años quiere cobrar factura. Pero no se lo permitiré, no permitiré que mi hija tenga una vida llena de visitas al medico y de inyecciones o medicamentos por el resto de su vida.
¿Ya sabes de que veneno hablo?
Incluso yo le compraba de vez en cuando una pequeña dosis de ese veneno. Lo que no sabia es que tal vez más tarde de ese mismo día también alguien más de la familia pensaría lo mismo y la dosis no seria tan pequeña, repitiendo el proceso día a día, sin contar que "de vez en cuando" nos permitíamos comer ciertos antojitos en la cena, algunas papitas fritas, platanitos fritos, hamburguesas, pizza, etc. Y con los años todo eso se volvió en una hígado graso y posibles futuros problemas coronarios.
Hoy llevamos una dieta más balanceada y sobre todo más saludable. Claro que gracias al apoyo de un grupo de mujeres profesionales en el área correspondiente.
Lo más triste de esto es que de no ser por esa mancha en el cuello yo no habría acudido al medico, porque ella se seguía viendo muy saludable, alegre y con mucha energía... No sospecharía de nada y en un lapso de al menos 6 meses llegarían los verdaderos problemas...
Así que solo me queda decirte; ten cuidado con lo que les das a los más peques, recordemos que estar "llenito" no es sinónimo de salud... o si tu tienes aquella mancha café al rededor del cuello acude con tu medico. Cuídate y cuida a tus seres queridos.
-Misaki E.

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